domingo

Mr. Cocodrile - A wild portrait


Érase una vez un cocodrilo que vivía de manera apacible en el río. Nadie le molestaba y él no molestaba a nadie (excepto, a las posibles presas de las que se alimentaba de cuando en cuando).

El río no era muy ancho y cada año tenía más caudal, y todos los demás cocodrilos que vivían con él le decían que algún día no se podría vivir allí, porque el caudal subiría tanto que habría un día en que se sumergirían y no podrían respirar nunca. Pero el cocodrilo no se preocupaba demasiado del futuro...disfrutaba y bromeaba con sus amigos, que se iban yendo poco a poco atemorizados.

El cocodrilo también estaba atemorizado, ya que veía que cada vez le era más difícil encontrar un punto en el que pudiera respirar algo que no fuera agua. Un día llovió mucho, y subió y subió el cauce del río hasta desbordarse, arrastrando al cocodrilo con él. Y así fue que el cocodrilo apareció un día muy lejos del lugar. Lo encontraron con una sonrisa  y unas marcas debajo de sus ojos como surcos de un río, como si se hubiera pasado la vida llorando. Fin.

5 comentarios:

  1. muy bueno!!!
    muy bueno!!!

    saludos

    ResponderEliminar
  2. las sonrisas envejecen el rostro, pero rejuvenecen el alma. (:

    ResponderEliminar
  3. Hola Migue, lo bueno de las propuestas como la de Fernando es que conoces a gente nueva. Gracias por pasarte por mi blog.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. me gusta que te flipe.
    a mi me molan tus dibujos :)

    ResponderEliminar
  5. Y de ahí lo de las lágrimas de cocodrilo!!!! ¡Qué chulo!

    Besicos

    ResponderEliminar